jueves, 19 de mayo de 2011

supongo que


me gustaría interrumpir tu cena familiar y ahorcarte con un cordón de zapatilla
tirarte de la silla y que sientas que te estás muriendo
no te quiero matar
quiero que vivas como se tiene que vivir
quiero crearte un complejo paranoide
que no puedas ver más a tu familia por el miedo del recuerdo
que los olores de tu casa te recuerden mi cara
quiero que pases un verano encerrado en tu cama, pensando cada día
en tirarte de la terraza de tu edificio
quiero atarte a una silla y darte de comer los brazos de tu familia
y las conchas peludas de todas tus novias de primaria
quiero que cada recoveco de tu cuerpo simplón se llene de grasa y de muerte
y después lanzarte
a las fauces burlonas de
cincuenta
o
sesenta
jóvenes hormonales de secundaria

6 comentarios:

  1. y cuando lo vas a hacer? yo quiero ser testigo

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  2. Tengo los mismos sentimientos hacia mi padre.
    La juventud está perdida!!

    Cuando tenga hijos quiero que me digan:
    Papá, te quiero mucho. <3

    muy buen post. saludetes.

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  3. que los olores de tu casa te recuerden mi cara

    no me había dado cuenta de eso
    JAJAJAJAJ

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  4. Bueno, este texto me llevó a varios lugares. Con la rima interna de silla-zapatilla pensé en la poesía argentina de los noventa. Con eso de vivir como se tiene que vivir, a la escena de Fight Club en que amenaza al asiática con terminar lo que fue a hacer a Estados Unidos. Con lo de pasar el verano encerrado en tu cama, a Apocalypse Now cuando el tipo mira el techo con el ventilador, escena tan representativa de un estado mental. Y basta, que lo que escribís es bueno más allá de a lo que me remita.

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